Una extensa jornada de trabajo o de estudio puede traer acompañado un dolor cervical.
En kinesiología este dolor se lo denomina rectificación cervical. Consiste en la rectificación de la columna producto de una mala postura.
La licenciada en kinesiología, Elena Mollo, explicó algunas cuestiones que se pueden tener en cuenta para evitar llegar al dolor cervical.
El hecho de estar muchas horas frente a una computadora puede traer este tipo de consecuencias. Con solo ubicar el monitor a la altura de la vista y el teclado en una posición que no implique forzar los hombros es un buen comienzo.
Otro cuestión que puede ser tenida en cuenta por quienes están muchas horas estudiando, es sentarse lo más pegado posible al espaldar de la silla, y con la silla lo más cerca posible de la mesa. En esa posición, la columna conserva su forma original y se evita la rectificación.
Pero si el dolor ya está instalado, el paciente debe realizar una consulta profesional. El tratamiento más común para corregir la rectificación cervical es la reeducación postural global, cuya duración depende del caso de cada paciente.
Prevenir o corregir a tiempo el dolor cervical es muy importante, porque los síntomas son muy invalidantes.